jueves, marzo 30, 2006

Una anécdota


Lugar: Buenos Aires
Hora: A eso de la 1:00 A.M
Acompañante: Mi hermano

Caminaba con Felipe, ya hacia al hotel, por alguna calle del centro de Buenos Aires. Veníamos de comer en la zona ultra sofisticada de Puerto Madero, claro que Eduardo gastaba, no vendríamos de allá si no hubiéramos estado con él y Alba, pero iban adelante, por eso no los cuento como acompañantes, no en el momento que les pienso contar. Era una de esas calles afrancesadas (aparizadas, de París), con edificios de media altura, y todo muy bonito, salvo por tanta basura. No había casi nadie en las calles. Caminábamos románticamente, con esa sensación que le da a uno en las grandes ciudades, y mas en las ciudades “literarias”, de ser el protagonista de una novela policíaca. A lo lejos, enfrente de nosotros, vimos a un par de jóvenes escarbando entre la basura. Alba reaccionó apretando el ritmo de sus pasos y Eduardo la siguió. Mi hermano y yo, al haber visto en noches anteriores que eso de recoger basura en Buenos Aires es algo más bien normal, nos quedamos atrás, caminando sin prisa alguna. Al acercarnos a los dos jóvenes, el poco miedo que hubiéramos podido tener, producto de una infancia de terror a los recogedores de basura en Bogotá, se nos esfumó del todo. Los encontramos metidos en la basura, seleccionando, discutiendo sobre qué llevar. La basura era particular, se trataba de casetes de VHS, cientos de ellos, esparcidos por todo el andén, todos marcados enigmáticamente. Paramos y nos sumamos a la búsqueda. Después de escarbar un poco, y decidirnos por un título, continuamos con la caminata nocturna y volteamos por florida, que siempre tiene gente, allí nos esperaban Alba y Eduardo. El casete decía lo siguiente: Publicidad insólita 1986.

En Bogotá el asunto del casete se olvidó, hasta que mi hermano me dice un día: Mira que escuché el casete que recogimos, pero no había nada, sólo estática y una voz toda tenebrosa diciendo algo que no se entiende, pero me dio miedo ver más y lo saqué. En seguida estábamos frente al televisor poniendo la bendita cinta en el VHS. Pero saben algo, la cinta tenía justamente eso, estática y una voz de ultratumba diciendo algo que no se entiende. La sacamos y la volvimos a meter, esta vez el audio cambió, la voz ya no era de ultratumba, era más bien ridícula, una voz a más revoluciones de las necesarias, como la de las ardillas (recuerdan a Albin y las ardillas). El caso es que era sólo eso, un casete viejo con el video dañado y el audio sobrerevolucionado. Lo adelantamos todo y siempre era lo mismo. Nuestro interés policiaco se perdió. Ahora la cinta está al lado de las pelis de Felipe, en su cuarto. En verdad me hubiera gustado que fuera otra cosa.

domingo, marzo 26, 2006

Respuesta a un artículo de El Tiempo

La siguiente es una carta que le envié a la señora Angela Marulanda, en respuesta a su artículo del domingo.

Después de leer su artículo sobre la adopción en parejas homosexuales, me vi abocado a escribir una respuesta a sus opiniones. Las razones son sencillas: soy homosexual, y no estoy de acuerdo con sus puntos de vista, que creo caen, en eso que en su primer párrafo usted llama falta de argumentos, y para no distorsionar la cito:

"Creo que un motivo por el cual es difícil resolver si es o no apropiado que se apruebe la adopción para parejas homosexuales, es que las razones en pro y en contra no se sustentan"

Frase que pensé tendría que ver con su escrito, sustentaría su opinión, fuera la que fuera, pero que muy a mi pesar es sólo el comienzo de un confuso texto, donde lo único que queda claro es que quien lo escribe tiene problemas para aceptar otras realidades diferentes a la heterosexualidad, y creyéndose un modelo, opina sobre cosas que no entiende, por ignorancia o prejuicios.

Voy por partes. Usted dice que tener hijos no es un derecho sino una capacidad con que nos privilegia la naturaleza. Hasta ahí todo está claro ¿Pero no iba acaso a hablar de la adopción?, ¿no es ella un derecho para aquellos a quienes la naturaleza no los privilegió con la capacidad para tener hijos? Claro, usted dice que igual la adopción es un privilegio, al cual sólo acceden personas que cumplen con una rigurosa lista de requerimientos. Pero este, lejos de ser un privilegio "natura" tiene que ver con su capacidad económica y el deseo de hacerlo, entonces pensar en la concepción y en la adopción en los mismos términos es altamente inadecuado, en vez de aclarar, confunde.

Entre los requisitos que usted menciona para poder ser candidato a la adopción, están la edad, su posición económica y su salud mental. Dice usted que no sólo a los homosexuales se les niega ese derecho, sino también a los muy jóvenes o muy viejos, a los pobres y a los enfermos mentales, pero en ningún momento sustenta el por qué de esas decisiones y cómo repercutiría en el niño el que sus padres adoptivos tuvieran esas características, se conforma con dar por argumento su simple mención. Pero no me dejo confundir, una cosa es ser pobre o enfermo mental, y otra ser homosexual. Es apenas obvio que una persona con escasos recursos económicos no pueda satisfacer a cabalidad todo lo que un niño necesita para su crecimiento, y que por lo tanto sea una causa para negar el derecho a la adopción. Si se está enfermo de la cabeza, tampoco se puede garantizar la estabilidad emocional que necesitaríaa un ser que crece aún. Pero en ningún momento, su artículo se refiere al caso específico de la homosexualidad, ¿no cree usted que una pareja de mujeres, con estabilidad laboral, deseos de conformar una familia, y la estabilidad emocional exigida a los heterosexuales, está en la misma capacidad de criar y darle a un niño o niña el afecto, educación y bienestar necesarios, que una pareja heterosexual?

Ahora bien, la pregunta que en verdad es relevante debe enfocarse hacia las necesidades de los niños. Y para no entrar con maniqueos en el tema, ir a nuestras infancias y ver que pasó allí.

¿Que modelo de familia se propone para que tipo de niños?, ¿estamos basando esos modelos en lo que creemos le hace bien a un niño o en la aceptación pasiva de un paradigma que poco tiene que ver con la sociedad y las relaciones en nuestro contexto?

Continúa usted diciendo que además de los requerimientos que usted cita, hay otro, inventado por usted al parecer, y que tiene que ver con la idea de masculinidad y feminidad, la cito:

"los padres y las madres, son modelos que les confirman su masculinidad a los hijos y su feminidad a las hijas, lo cual no pueden hacer los homosexuales"

"Así como una persona invidente no tiene el privilegio de conducir un auto, o un diabético tampoco lo tiene de comer lo que comen todos, los homosexuales tienen la limitación de no poder ofrecerle al hijo una imagen definida del género masculino ni del femenino, porque no son ni lo uno ni lo otro"

Aparte del sesgo tremendamente homofóbico de las frases anteriores, en donde insinúa que la homosexualidad es por un lado una incapacidad física y por otro una enfermedad, creo que es indispensable aclarar que no es ni lo uno, ni lo otro. Además su desconocimiento de la realidad de los homosexuales la lleva a pensar que son personas que no se identifican con un género. Nada más falso.

Haría falta aclarar que según eso, hay una idea general de lo masculino y lo femenino, ¿pero cual es? ¿Y es esa idea necesariamente importante?

Yo crecí en una familia de padres heterosexuales, al igual que la mayoría de mis amigos homosexuales. La conclusión lógica de esto es que la sexualidad de los padres no influye en el comportamiento sexual de los hijos, y por lo tanto no es suficiente razón como para negarles a dos personas con el deseo y la capacidad económica, su derecho a conformar una familia.

Pero su sarta de frases intolerantes no para ahí (es un artículo del periódico más importante del país). Cito de nuevo:

"Por otra parte, a pesar que las series de tv muestran a las parejas homosexuales como ideales, me pregunto si esa armonía es posible en familias conformadas por quienes han tenido que padecer el repudio de la sociedad y a menudo el de sus propios padres"

Acá es evidente que quien escribe esto tiene serios problemas para enfrentar su repudio y hacer parecer su texto "un intento de comprensión" y se convierte en una prueba de sus más sinceras aversiones, odios y temores. Pero bien sabemos que aunque es válido decir lo que uno piensa, no se puede pretender transformar una sociedad a punta de esos odios, de esas aversiones, de esos temores. Porque se estaría formando una sociedad temerosa y con odio. ¿Usted propone que el remedio a ese repudio sea vulnerar los derechos de quienes son repudiados? Eso no tiene el más mínimo sentido.

No cree usted que aceptar la adopción de parejas homosexuales, en vez de fomentar ese rechazo y ese estigma del que usted cree somos víctimas los homosexuales ayudaría a tener una visión más real de lo que en verdad significa ser homosexual, y por lo mismo atenuar el rechazo y la estigmatización.

Lamento que artículos como el suyo tengan la difusión de un periódico tan importante, y que eso que usted piensa pueda ser leído por tanta gente. Creo que desinforma y promueve amable y confusamente lo que en apariencia rechaza. Aunque tengo que reconocerle que sí, está sustentado como a usted le gusta, pero sustentado en el rechazo, la estigmatización, el odio, el repudio y por consiguiente en la estupidez. Pero no es nuevo para mi eso, ya sabía que esta es una sociedad estúpida y es apenas obvio que personas con la incapacidad natural de entender, pretendan ser modelos. ¿Una lástima no le parece?

jueves, marzo 23, 2006

domingo, marzo 19, 2006

Que bonito soy como me quiero

No quiero pensarlo mucho, porque de otra forma empezaría a descartarlo todo, a limpiar las ideas, decantarlas, hacerles eso que para mi es academia, aburrirlas, cubrirlas de moho y telarañas.

Tampoco hoy llegó el periódico, y sí, quería leerlo. El domingo pasado tampoco llegó. Es raro que pase eso justo el domingo, alguien se lo está quedando en algún punto de la cadena. Se imprime un periódico para nosotros, que lo pagamos anticipadamente para tenerlo en la puerta de la casa apenas empieza la mañana. Quien lo esté refundiendo debe pensar que un periódico a la semana no hace mella, no es un gran lío, que si decidiéramos quejarnos por una nimiedad como esa, seríamos seres insoportablemente sicorrígidos, que no soportan un hueco en la semana, un vacío de perfección, un daño en el sistema, por lo tanto seres a los que vale la pena hacerles eso. Yo creo que si estuviera leyendo todos los domingos el periódico de otra persona pensaría lo mismo.

Pero empecé hablando del periódico por otra razón. Esta semana leí un corto artículo sobre una encuesta realizada en Estados Unidos, que arrojó los siguientes resultados: Para ser más felices es necesario ser blanco, tener familia, ser republicano, y tener un trabajo por el que te paguen mucho, al menos más de 200.000 dólares anuales. El escritor del artículo aclara que es difícil saber si los resultados están cerca de la verdad, o al menos salva su opinión sobre lo que le toco escribir, haciéndose el cuestionamiento de si seríamos capaces de responder que somos infelices y sentimos frustración a la pregunta de: es usted feliz?.

También se puede sacar otra conclusión, claro, siempre se pueden sacar muchas conclusiones, y me parece pertinente que yo la saque en este caso, ya que me puse a escribir sobre esto, cuando lo que en verdad quería era escribir sobre otra cosa, pero siempre es así, entonces tengo que continuar con lo empezado.

También se podría concluir que los ricos mienten y que los pobres, los negros y los demócratas, son más sinceros, igualmente que el dinero es una condición insustituible para conseguir la felicidad. Entonces son la estupidez y el color de piel rasgos definitivos a tener en cuenta en el momento de concebir una nueva vida, los futuros padres deberán preguntarse, si desean que su hijo sea feliz, lo siguiente: soy negro? Soy pobre? Soy demócrata? Si la respuesta es afirmativa en cualquiera de los casos, se debe considerar seriamente la idea de no continuar esparciendo sus genes por el mundo, si es afirmativa en los tres, valdría la pena pensar en el suicidio.

Eso aplica a Estados Unidos, pero volvamos a lo de la pregunta y comámonos el cuento de que la cosa es así por esos lares, no sin antes empezar a cruzar información, que aunque irrelevante de momento, podría servirme más adelante para sacar una conclusión pasmosa (que arrogancia).

Vi mucha televisión hoy, intercalaba tandas de estudio del piano con televisión. Vi el canal VH1 (biechuan) hábil en mostrarnos sin anestesia aspectos de la vida en el país del norte, que aunque deberían asquearnos, terminan por convertirse en un modelo, inalcanzable y harto innecesario, pero deseado. El programa mostraba los 100 cuerpos mas deseados. Un recuento de belleza estereotipada, riqueza y poder (que no es lo mismo, acaso no es Irak un país riquísimo?) y obviamente, de felicidad.

Los 100 cuerpos más deseados pertenecían todos, sin excepción, a personajes ricos, la mayoría blancos, y todos tan concentrados en su propia belleza, que el saber si son demócratas o republicanos, no parecía uno de sus cuestionamientos de vida.

Va otro dato. El partido conservador le ganó al liberal en las pasadas elecciones de cámara y senado. La derrota del partido liberal es insólita, sobre todo sabiendo que la participación para su consulta fue masiva. Acaso quienes votaron tan fácilmente por Serpa, Pardo y Rivera, al momento de decidirse por los aspirantes a la cámara y el senado, terminaron por darle el voto a un candidato de los partidos uribistas?. Por otro lado, la cantidad de votos nulos es inaudita por abultada. Sin duda mucha gente no entendió cómo votar. Pudo darse que quienes votaron a la consulta liberal, confundidos ante la nueva cara del tarjetón, terminaran por votar equivocadamente, haciendo que su voto fuera nulo. Pero por qué hago referencia sólo al partido liberal? Los conservadores estaban con Uribe así que no se puede hacer la misma comparación respecto a la consulta, y hay otro ingrediente que marca una diferencia sustancial en el tipo de voto; los conservadores no son pobres, a lo sumo algo arrancados, pero difícilmente pobres, por lo mismo tienen educación, y por consiguiente pudieron entender el nuevo tarjetón. No fue su mayoría en número de votantes, sino su mayoría de votantes con la capacidad de no botar su voto, lo que determinó un resultado que a todos nos parece sorprendente, pero ante todo, sospechoso.

Y donde quedan nuestros cuerpos deseados, nuestros torsos sin grasa? Están en la televisión, casi exclusivamente allí, alimentando ideales y proponiendo paradigmas, esquemas a seguir, haciéndonos sentir pobres, feos y ustedes ya saben: infelices.

Me gustaría seguir gravitando en estos temas, pero me impaciento si no puedo hilarlos como me gustaría, entonces se los mando así, como un feto que termina en una caneca y posteriormente en un basurero al sur de la ciudad. Para que no se sientan dirigidos por mis pensamientos, para que los hilen como quieran.

domingo, marzo 12, 2006

Las cosas que se aprenden (y como desaprendo escribiendolas)


Hoy hicimos galletas. Carlos vino a mi casa con un libro enorme de recetas e hicimos galletas. Mientras tanto en la tele nos decían como iban quedando las votaciones, al parecer el voto nulo fue un gran ganador de la jornada, y el voto en blanco en las curules para indígenas. Curules no aparece en el diccionario de Word y en la rae no parece tener plural, además es una palabra que se usa en México El Salvador, Ecuador y Colombia, ahora me las tendré que ver con la molesta raya roja. La palabra Word, este programa la pone con mayúscula automáticamente, automáticamente es una palabra sobresdrújula, Word es una palabra en ingles, y no debería ir con mayúscula, mayúscula es esdrújula, esdrújula también. Mi candidato a la cámara no ganó curul, papá Noel ganó la consulta del polo, el polo es un extremo, pero la rae me dice que no es eso, que es el punto en que el eje corta a una superficie de revolución, pero hay muchas acepciones, la que yo creía saber es la de: Punto opuesto a otro en un cuerpo, pero no es muy claro, también es un baile o aire popular de Andalucía, y un deporte de millonarios, lo juegan en Afganistán, aunque no tenga coherencia económica esa frase. A los juegos y a quienes los juegan no les importa si mi frase tiene coherencia. Hoy no llegó el periódico a la casa, tampoco le llegó al vecino, justo hoy que quería leerlo. Las galletas quedaron ricas. Ahora sé que las galletas están hechas básicamente de mantequilla y azúcar y sé que el periódico no llega justo cuando quieres leerlo y que este programa se cree tan importante que no soporta verse escrito con letras minúsculas y que los indígenas prefieren votar en blanco, y que su voto en blanco es muy válido, ahora les toca repetir elecciones y los aspirantes tienen que ser otros. Sé también que polo es una marca de ropa, de helados, un juego, un baile, un aire popular, y muchas cosas más. Yo voté por el polo, pero no entiendo por qué se llama así el partido. Lo que más me gustó del día fueron las galletas, les echamos chips de chocolate, y ralladura de mandarina porque no encontramos naranjas. Mejor voy a comerme una...

miércoles, marzo 01, 2006

Homofobia, estupidez cristiana, matrimonio alegre y "the others"

Leo el periódico y me sorprende encontrar, de un lado el crucigrama del domingo y del otro la sección Nación del miércoles primero de Marzo. Vuelvo a ver y no me equivoco, imprimieron una página del domingo el miércoles. Aprovecho y lleno lo que puedo del crucigrama, obviamente no lo acabo y me rompo los sesos pensando en qué puede ser sucesión de sonidos de siete letras y una silaba pe atravesada en el medio. Ni modo, otro crucigrama que no completo. Le doy la vuelta y vuelvo al presente, donde una entrevista a la senadora Alexandra Moreno Piraquive me impide ignorar esa página. El encabezado: "matrimonio homosexual sería traumático", sin duda me interesa. La entrevista transcurre en preguntas bobas sobre un tal partido Mira de cristianos, ella dice que no les preguntan a los que entran si creen en el diablo o en Dios (uno con mayúscula, el otro no), yo me pregunto, le estaba mamando gallo al entrevistador o respondió eso como argumento? LLego finalmente al meollo de mi lectura, cuando le preguntan si se deben legalizar las relaciones homosexuales. Ella responde: "Nosotros no estamos de acuerdo con los matrimonios homosexuales. ¿Usted se imagina un niño con cinco años, abriendo los ojos y viendo que sus papas son dos hombres que se estan besando y haciendo locuras?". No, esta señora no le mama gallo al entrevistador, dice lo que piensa (que miedo).

Voy a sentar posición al respecto, porque estoy en una etapa en que me parece super necesario aclararlo todo, en lo posible. Yo no me imagino de cinco años abriendo los ojos y viendo a mi papá y mamá, obviamente heterosexuales, besándose y haciendo locuras. Me detengo en la palabra "locuras", se refiere al sexo con ella , así como no ser cristiano es creer en el diablo? no sé, pero definitivamente no me imagino a mis padres haciendo "locuras" (que pena por seguir con la palabreja, pero quiero ver hasta dónde se llega con eufemismos cristianos) frente a mí, aunque sé que las hacen. Me meto en el tema. Yo soy homosexual y mis padres no, como la gran mayoría de homosexuales que conozco, me crié en un ambiente desprovisto de diversidad sexual. Igual mi opción terminó por ser esta y me encuentro a gusto con ella, pero sin duda me hace cuestionar todo el andamiaje social construído en torno al sexo y las relaciones. Esta señora en ningún momento (notese bien) habla del amor necesario en la crianza, no sólo en la pareja sino hacía el niño o niña. Ella se remite exclusivamente a la escena irrelevante con el niño y el beso, ese horror a un gesto de cariño no les parece bastante sospechoso? a mí si, y la omisión de las cosas que verdaderamente forman, no me parece para nada trivial. Considero que una pareja homosexual debería tener iguales derechos que una heterosexual, respecto a los distintos efectos legales y (acá va la bomba), a la posibilidad no de concepción, claro está, sino de crianza de un niño o niña. En toda pareja heterosexual no es un deber criar ni concebir, es una opción, en una homosexual la concepción no es posible, pero para criar se necesita es de amor, algo de dinero, y las ganas, eso es todo, entonces cual es el impedimento?. La implicaciones sociales que pueda tener la adopción de niños por parte de parejas homosexuales, serán en su mayoría positivas. Por un lado, los deseos homofobos se irán eliminando si desde pequeños los niños y niñas no ven en la inclinación sexual un problema, la agobiante dicotomía mujer hombre también se ira borrando, y empezaremos a ser personas, igualmente se beneficiarán muchos niños que de padres heterosexuales, nunca fueron deseados, ni bien tenidos y mucho menos amados. De qué se trata el cristianismo? de crear odios y separaciones innecesarias en las sociedades?. Pareciera que sí.
!Lo que hace la estupidez humana!, espero que un hijo o hija de esa señora sea homosexual, en verdad lo espero, para que vea de qué se trata verdaderamente la "locura". No voten por gente así.

El mismo periódico me llevó a un artículo de Yolanda Reyes donde critica a los publicistas de la campaña de Gina Parody, acusándola de maquiavélica (la campaña). La frase de su campaña es: "O estás con nosotros o estás con los otros". La pregunta clave es, quienes son los otros? pues todos los que no esten con ellos, pero quienes entonces? eso se parece a:" Quienes no estan conmigo estan en contra mía", les recuerda algo de la cristiana esa?. Espero que como en la película de Amenabar, "the others", se den cuenta que los otros eran ellos mismos. Gracias a Yolanda y su hijo por inspirarme este comentario.

No es más

Souvenirs

Viajar por perú en bus puede ser muy reconfortante, terramozas, bebidas y comida, además el paisaje no hay que imaginárselo
Un perro sin pelaje, común por esos lares, muy raro.
Ositos y alpaca bebé, que ternurita tan apapachable
El amarillismo sí tiene lugar en Perú
Alan presidente (que descaro)